Marihuana Hermafrodita
Dentro del reino vegetal hay una gran variedad de formas que posibilitan la reproducción. En botánica cuando en una misma planta están presentes ambos sexos a la vez, ésta se denomina monoica.
Por el contrario es dioica cuando hay individuos machos e individuos hembras. Todo el mundo sabe que en el cannabis hay plantas macho, y plantas hembra.
Lo cierto es que ésta es una verdad a medias. También hay plantas hermafroditas, que a su vez son monoicas.
Aún hoy en día está vigente el eterno dilema sobre si la planta del cannabis es monoica o dioica. Lo mas común es que el cannabis sea dioico, pero también hay un pequeño porcentaje de individuos monoicos.
Características de las hermafroditas
Las plantas de cannabis hermafroditas son en realidad hembras que además de tener flores femeninas, también desarrollan una pocas flores masculinas. Son un rara avis que de vez en cuando y sin avisar, surge en los cultivos.
En esos casos Distinguir la marihuana macho y hembra se convierte en una tarea imposible de realizar. Parece contradictorio que en una planta que en esencia se podría considerar dioica, pero así es.
En cualquier caso es una particularidad natural de la planta. Este rasgo siempre debe intentar prevenirse y evitarse.
Sólo el 1% de las plantas llegan a presentar algún rasgo hermafrodita. Las posibilidades de toparnos con semillas (no deseadas) entre nuestra cosecha es realmente baja, pero la mera presencia de éstas reduce la calidad y cantidad de la misma.
Planta Hermafrodita
Hay que estar atentos para cuando las plantas entran en la pubertad y desarrollan claramente sus rasgos sexuales. Normalmente a la hora de sexar el cannabis basta con fijarse en la distancia internodal de las ramas, y la figura de la planta.
Con un simple vistazo se distinguen claramente los dos sexos sin la necesidad de tener que fijarnos en las flores para La sexación de la marihuana. Para evitar las plantas hermafroditas no sólo hay que examinar y analizar las flores, sino que hay que hacerlo con todas y cada una de ellas.
Origen del Hermafroditismo
El hermafroditismo en el caso de la marihuana tiene dos orígenes claramente diferenciados. Por un lado se encuentra la predisposición genética, y por el otro la causa ambiental.
Desde un punto de vista genético hay variedades que presentan un mayor riesgo de desarrollar individuos bisexuales. Esta característica es muy común en la Sativa Tailandesa.
Las semillas procedentes de una planta hermafrodita son más propensas a producir individuos de la misma condición. Por otro lado ahora nos centraremos en las causas ambientales.
Una planta estresada es un blanco fácil para que el hermafroditismo haga acto de presencia. Cambios bruscos en el fotoperiodo pueden desencadenar la bisexualidad.
De igual modo cambios y contrastes térmicos pronunciados también la originan. Los excesos de fósforo y potasio son una causa conocida.
Una temperatura ambiental elevada y cercana a los 30º sostenida en el tiempo debe ser evitada. Una cosecha tardía puede empujar a la planta hacia donde no queremos.
Por no hablar de que un riego inadecuado igualmente lo provoca. Hay que saber Cómo regar correctamente las plantas de marihuana.
En general cualquier tipo de estrés induce en la planta a una mayor probabilidad de que se vuelva bisexual. La aplicación de productos químicos en las plantas también puede inducir hermafroditas; incluyendo la produción de semillas feminizadas de una forma inadecuada.
Consecuencias
Si en alguna de vuestras plantas se hacen visibles tanto flores masculinas, como femeninas; tenéis un problema. Lo más sensato es abstenerse de realizar cualquier tipo de experimento genético, y cortar por lo sano.
Una planta hermafrodita puede desde contaminar con unas pocas semillas en algún cogollo, hasta arruinar todo la cosecha. Sin embargo lo más común es lo primero, y además pasarán desapercibidas hasta el momento de la cosecha.
En cualquier caso en el momento en el que se detecten signos de hermafroditismo hay que tomar medidas. Si la presencia de flores masculinas es abrumadora hay que eliminar de forma fulminante la planta.
Mientras que si los indicios son meramente testimoniales siempre se puede recurrir a la cirujía y extirpar los órganos masculinos. En etapas de floración muy avanzadas hay que adelantar la cosecha.
De lo contrario todo serán problemas. Cogollos con alguna semilla que tendrán menos componentes activos, y un mal sabor.
O todo un cultivo echado a perder. Y no digamos si la hermafrodita contamina con su polen a alguna hembra que esté destinada a producir semillas; ruina total.