Lubricante de Marihuana, Preparación y Usos
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Vamos a ver como hacer lubricante de marihuana paso a paso y hablaremos tambien de Foria, un lubricante comercial que promete 15 minutos de orgasmos.
Partiendo de una base de oleosa, obtenemos un lubricante de cannabis casero con el que aderezar la práctica de sexo. Con su utilización logramos obtener un placer sin igual y alcanzar un orgasmo sensacional.
El lubricante de marihuana promete aumentar el placer sexual de las mujeres (y los hombres) que apuesten por este producto natural. Una vez probado, el sexo ya nunca será igual.
Puede que nos parezca que la utilización de lubricantes sexuales nos haga ser vanguardistas. Sin embargo y aunque parezca mentira, los lubricantes sexuales existen desde hace siglos.
Otra cuestión es que los tabúes que suelen rodear al sexo, así como la represión ejercida por muchas religiones, hayan mantenido a esos lubricantes en la clandestinidad. Los lubricantes sexuales son tan antiguos como la propia humanidad.
Los lubricantes íntimos están pensados para reducir la fricción en los genitales o el ano, facilitando la relaciones sexuales y favoreciendo la consecución de placer. Ya sea por una falta de lubricación natural, o para mejorarla, los lubricantes sexuales son muy beneficiosos y útiles para enriquecer la sexualidad.
Tanto en la penetración como en el caso de la masturbación, los lubricantes íntimos aseguran una excitación y un placer extra. Un orgasmo con lubricante es más orgasmo.
El lubricante de marihuana es una excelente alternativa a los habituales lubricantes sexuales. En farmacias, sexshops y grows podemos encontrar lubricante de cannabis para uso íntimo, pero por mucho que se esfuercen esos productos sólo contienen aceite de semillas de cáñamo.
Aunque los cañamones gozan de unas sensacionales propiedades, cuando me refiero a lubricante de marihuana voy por otro camino. En consecuencia, estoy hablando de un lubricante de marihuana (valga la redundancia) elaborado con marihuana.
Si, marihuana 100% psicoaciva. Desde hace un par de años atrás circula por las redes sociales la existencia de un extracto de marihuana (Foria) entre cuyas aplicaciones está la de ser empleado como lubricante íntimo.
Con aceite de coco como vehículo, este lubricante de cannabis se presta a ofrecernos las propiedades del aceite de cannabis. Unas cuantas gotas de Foria (un rato antes de mantener relaciones sexuales) asegura un sexo muy placentero y a las mujeres las garantiza orgasmos múltiples.
Ni Foria es estrictamente un lubricante, ni fue ideado como complemento sexual. Pero lo cierto es que hay miles de testimonios que le avalan.
Foria concentra las virtudes del THC y otros cananbinoides con una finalidad terapeútica, pero mira tú por donde resulta que que a la marihuana se le puede dar un uso recreativo sin fumarla, inhalarla o ingerirla. El problema está en que al estar registrado como un medicamento y contener THC, la venta de Foria esta restringida.
La preparación de lubricante de marihuana casero no dista mucho de lo que sería preparar mantequilla de marihuana. Simplemente eliges una de las grasas que mejor combinan con la marihuana, asegurándote de que se adapta perfectamente al uso que le vas a dar.
Por medio de la aplicación de calor lograrás que el alma de la marihuana se funda y disuelva en el aceite. Haciéndolo siempre con pacienca y prudencia.
Las prisas no son buenas consejeras, y en este caso menos. Poniendo especial celo en que la temperatura no suba mucho más allá de los 100 grados celsius.
* Aceite de coco (250 ml).
* Lecitina de girasol (cucharada sopera).
* 15-20 gramos de cogollos.
* Grinder.
* Cazuela (mejor de barro).
* Cuchara.
* Colador.
* Embudo.
* Tarro de vidrio.
Empezarás el proceso de preparación moliendo los cogollos de marihuana con un grinder. Tienes que asegurarte de que todas las partes de los cogollos queden bien demenuzadas.
Seguidamente colocas a fuego muy lento la cazuela de barro con el aceite de coco. Una vez el aceite este caliente (10 minutos) añadimos lo cogollos picados y la cucharada de lecitina de girasol.
Durante un periodo de 3 o 4 horas (cada 20 minutos) removerás el conjunto con una cuchara. Por un lado ayudando a que los cogollos dejen escapar todo lo que atesoran dentro y por otro para que no se peque ni queme nada.
De forma alternativa es posible sustituir la cazuela de barro calentando el aceite de coco al baño maría. La razón por la que recomiendo una cazuela de barro es porque suelen tener un fondo más grueso y así logras impedir que el aceite se sobrecaliente.
En el caso de que te decantes por el baño maría las 3 o 4 horas de cocinado pasará a ser 6 u 8 horas. Independientemente de cual sea la opción escogida lo fundamental es evitar abrasar los cannabinoides.
Pasado el tiempo acordado hay que retirar la cazuela del fuego, y cuando el aceite se haya templado un poco procedes a colarlo. Sólo hay que colocar el embudo en el tarro de vidrio y a su vez el colador dentro del embudo.
A la hora de explicarlo puede parecer algo complejo, pero es de lo más sencillo. Viertes el aceite de coco y ya está.
Dejas pasar un rato para que el aceite se enfrie a temperatura ambiente y ya está listo el lubricante de marihuana casero. No te asustes si el aceite se solidifica, puesto que ese es su estado natural.
Su temperatura de gelificación está entorno a los 20º-25º. La mejor forma de conservación es almacenar el aceite en el frigorifico.
Como mínimo 30 minutos antes de practicar sexo se aplican unas cuantas gotas (sólidas) de lubricante de cannabis casero en la vagina o el ano. El contacto y la temperatura corporales harán que el aceite se funda rapidamente.
Quizás ese espacio de antelación sea el mayor inconveniente que tiene el lubricante de marihuana. Nada te impide el aplicar el lubricante con menos antelación, pero ten en cuenta que el placer que obtendras ni por asomo será el mismo.
Si te gusta el “aquí te pillo aquí te mato” el lubricante de cannabis puede parecerte una pérdida de tiempo que no aporta nada. Ahora bien, ya eres mayorcito para valorar si te compensa (o no) el placer que vas a cosechar y vivir un orgasmo increible.
Como consejo personal te diré que una forma de aplicar el lubricante de marihuana casero con tiempo es el dar un masaje previo a la pareja haciendo énfasis en la zona vaginal y anal. Que mejores preliminares y preparación; más sabiendo lo que vendrá después.
En el caso de que a lo largo de las practicas sexuales se realicen cunilingus, anilingus u otro tipo de felaciónes en principio el lubricante de cannabis casero no tendría porque ser un obstáculo. Parece ser que el sabor y olor no son desagradables pero os confieso que yo no le he probado, así que no me hagaís mucho caso.
Si eres de los que por la razón que sea utlizan preservativo has de sabe que el aceite de coco daña el latex, así que tendrás que comprar condones de poliuretano. Este es otro de los contras de el lubricante de marihuana casero hecho a base de aceite de coco.
El sexo en solitario (la masturbación) no está reñido con la utlización de lubricante de cannabis. Si te gusta disfrutar de uno de los mayores placeres de la vida y compartir ese momento contigo mismo, te invito a hacerlo con lubricante de cannabis casero.
La marihuana no sólo nos provee de relajación y placer por los métodos tradicionales. Me refiero a que hay mucha gente que consume marihuana para mejorar el sexo, pero los efectos y las sensaciones que provoca el fumar un porro son muy diferentes a los que produce el lubricante de cannabis.
La primera y principal razón es que con el lubricante vamos directos al grano. En consecuencia se focaliza e intensifica mucho mejor el potencial de la marihuana.
Aún conteniendo los mismos compuestos psicoactivos que podemos encontrar en un porro, no tiene los mismos efectos. Al no entrar en juego el hígado ni el torrente sanguíneo, se metaboliza de otra manera.
Con lo cual no te colocará como de costumbre, pero si te recompensará con una relajación y un placer eufórico. Y ya no digamos si formas parte del sexo femenino.
Porque son precisamente ellas las más afortunadas a la hora de utilizar el lubricante de marihuana casero. Según cuentan algunas féminas este aceite de cannabis es capaz de proporcionarlas un placer extra y prolongar el orgasmo durante minutos.
No para todas las mujeres es fácil llegar al orgasmo, pero con esta preparación se da el caso no sólo de que el sexo se vuelve más placentero, sino que además los orgasmos múltiples se vuelven más habituales.
Al tratarse de un ungüento de uso tópico, la vagina de la mujer es más eficiente asimilando los componentes activos. Por el contrario el pene no es capaz de importar las bondades del lubricante de cannabis con tanta facilidad.
Pero tranquilo; el placer no es exclusivo de la mujer. El flujo sanguíneo se incrementa sensiblemente y mejora tu rendimiento en la cama.
También hay que destacar que este elixir mágico vuelve más sensibles los órganos sexuales. Multiplicando por 10 las sensaciones y experiencias eróticas.
Dentro de los ingredientes necesarios para su preparación está incluida una cucharada de lecitina de girasol. Un componente que es vital para ayudar a que los cannabinoides sean absorbidos con más facilidad por el cuerpo.
Si eliminas a la lecitina de la lista en vez de lubricante de cannabis casero lo que estarías elaborando sería aceite de coco cannábico. También podrías utilizarlo como lubricante, pero el placer disminuiría mucho y ya no digamos el orgasmo.
En contra de lo que mucha gente afirma el lubricante de marihuana no es algo exclusivo para la mujer. Si bien es cierto el los organos femininos estan predispuestos a asimilar mejor el lubricante de cannabis, no es menos cierto que el varón puede aprovechar al máximo el potencial del lubricante; tanto en pareja como en solitario.
Antes ir terminando quiero destacar otra cualidad nada despreciable del lubricante de marihuana casero. En su preparación no han entrado en juego productos químicos que pudieran ser perjudiciales para el organismo, con lo cual además de procurarnos un placer y orgasmos espectaculares, tenemos garantizada la excelente calidad del producto que estamos utilizando.
Quizás te pique la curiosidad y tengas la tentación de innovar y sustituir el aceite de coco por otra grasa. Es mejor utilizar aceite de coco ya que este potencia la acción del cannabis.
Si quieres experimentar te invito a que lo hagas con alguna receta cannábica. Puedes probar a hacer un pastel de marihuana a tu manera, o una pizza de marihuana singular.
Te recomiendo que para hallar las dosis y tiempos más convenientes lo mejor es ir probando por tu cuenta. Cada cuerpo es único, y no hay dos iguales.
Para acabar quiero decirte que para aquellas parejas a las que les sea difícil la concepción, el lubricante de marihuana puede ser un buen aliado. La relajación y el placer que proporciona predisponen a la mujer a quedarse embarazada.
Mira tú por donde el cannabis también puede ayudar a convertir en realidad el sueño de muchas parejas. Haciéndolo de una forma natural y en la intimidad conyugal.
Partiendo de una base de oleosa, obtenemos un lubricante de cannabis casero con el que aderezar la práctica de sexo. Con su utilización logramos obtener un placer sin igual y alcanzar un orgasmo sensacional.
El lubricante de marihuana promete aumentar el placer sexual de las mujeres (y los hombres) que apuesten por este producto natural. Una vez probado, el sexo ya nunca será igual.
Los Lubricantes y el Sexo
Puede que nos parezca que la utilización de lubricantes sexuales nos haga ser vanguardistas. Sin embargo y aunque parezca mentira, los lubricantes sexuales existen desde hace siglos.
Otra cuestión es que los tabúes que suelen rodear al sexo, así como la represión ejercida por muchas religiones, hayan mantenido a esos lubricantes en la clandestinidad. Los lubricantes sexuales son tan antiguos como la propia humanidad.
Los lubricantes íntimos están pensados para reducir la fricción en los genitales o el ano, facilitando la relaciones sexuales y favoreciendo la consecución de placer. Ya sea por una falta de lubricación natural, o para mejorarla, los lubricantes sexuales son muy beneficiosos y útiles para enriquecer la sexualidad.
Tanto en la penetración como en el caso de la masturbación, los lubricantes íntimos aseguran una excitación y un placer extra. Un orgasmo con lubricante es más orgasmo.
Lubricante de Marihuana
El lubricante de marihuana es una excelente alternativa a los habituales lubricantes sexuales. En farmacias, sexshops y grows podemos encontrar lubricante de cannabis para uso íntimo, pero por mucho que se esfuercen esos productos sólo contienen aceite de semillas de cáñamo.
Aunque los cañamones gozan de unas sensacionales propiedades, cuando me refiero a lubricante de marihuana voy por otro camino. En consecuencia, estoy hablando de un lubricante de marihuana (valga la redundancia) elaborado con marihuana.
Si, marihuana 100% psicoaciva. Desde hace un par de años atrás circula por las redes sociales la existencia de un extracto de marihuana (Foria) entre cuyas aplicaciones está la de ser empleado como lubricante íntimo.
Con aceite de coco como vehículo, este lubricante de cannabis se presta a ofrecernos las propiedades del aceite de cannabis. Unas cuantas gotas de Foria (un rato antes de mantener relaciones sexuales) asegura un sexo muy placentero y a las mujeres las garantiza orgasmos múltiples.
Ni Foria es estrictamente un lubricante, ni fue ideado como complemento sexual. Pero lo cierto es que hay miles de testimonios que le avalan.
Foria concentra las virtudes del THC y otros cananbinoides con una finalidad terapeútica, pero mira tú por donde resulta que que a la marihuana se le puede dar un uso recreativo sin fumarla, inhalarla o ingerirla. El problema está en que al estar registrado como un medicamento y contener THC, la venta de Foria esta restringida.
Cómo Hacer Lubricante de Marihuana
La preparación de lubricante de marihuana casero no dista mucho de lo que sería preparar mantequilla de marihuana. Simplemente eliges una de las grasas que mejor combinan con la marihuana, asegurándote de que se adapta perfectamente al uso que le vas a dar.
Por medio de la aplicación de calor lograrás que el alma de la marihuana se funda y disuelva en el aceite. Haciéndolo siempre con pacienca y prudencia.
Las prisas no son buenas consejeras, y en este caso menos. Poniendo especial celo en que la temperatura no suba mucho más allá de los 100 grados celsius.
Ingredientes
* Aceite de coco (250 ml).
* Lecitina de girasol (cucharada sopera).
* 15-20 gramos de cogollos.
Material Necesario
* Grinder.
* Cazuela (mejor de barro).
* Cuchara.
* Colador.
* Embudo.
* Tarro de vidrio.
Modo de Preparación
Empezarás el proceso de preparación moliendo los cogollos de marihuana con un grinder. Tienes que asegurarte de que todas las partes de los cogollos queden bien demenuzadas.
Seguidamente colocas a fuego muy lento la cazuela de barro con el aceite de coco. Una vez el aceite este caliente (10 minutos) añadimos lo cogollos picados y la cucharada de lecitina de girasol.
Durante un periodo de 3 o 4 horas (cada 20 minutos) removerás el conjunto con una cuchara. Por un lado ayudando a que los cogollos dejen escapar todo lo que atesoran dentro y por otro para que no se peque ni queme nada.
De forma alternativa es posible sustituir la cazuela de barro calentando el aceite de coco al baño maría. La razón por la que recomiendo una cazuela de barro es porque suelen tener un fondo más grueso y así logras impedir que el aceite se sobrecaliente.
En el caso de que te decantes por el baño maría las 3 o 4 horas de cocinado pasará a ser 6 u 8 horas. Independientemente de cual sea la opción escogida lo fundamental es evitar abrasar los cannabinoides.
Pasado el tiempo acordado hay que retirar la cazuela del fuego, y cuando el aceite se haya templado un poco procedes a colarlo. Sólo hay que colocar el embudo en el tarro de vidrio y a su vez el colador dentro del embudo.
A la hora de explicarlo puede parecer algo complejo, pero es de lo más sencillo. Viertes el aceite de coco y ya está.
Dejas pasar un rato para que el aceite se enfrie a temperatura ambiente y ya está listo el lubricante de marihuana casero. No te asustes si el aceite se solidifica, puesto que ese es su estado natural.
Su temperatura de gelificación está entorno a los 20º-25º. La mejor forma de conservación es almacenar el aceite en el frigorifico.
Cómo Utilizar el Lubricante de Marihuana
Como mínimo 30 minutos antes de practicar sexo se aplican unas cuantas gotas (sólidas) de lubricante de cannabis casero en la vagina o el ano. El contacto y la temperatura corporales harán que el aceite se funda rapidamente.
Quizás ese espacio de antelación sea el mayor inconveniente que tiene el lubricante de marihuana. Nada te impide el aplicar el lubricante con menos antelación, pero ten en cuenta que el placer que obtendras ni por asomo será el mismo.
Si te gusta el “aquí te pillo aquí te mato” el lubricante de cannabis puede parecerte una pérdida de tiempo que no aporta nada. Ahora bien, ya eres mayorcito para valorar si te compensa (o no) el placer que vas a cosechar y vivir un orgasmo increible.
Como consejo personal te diré que una forma de aplicar el lubricante de marihuana casero con tiempo es el dar un masaje previo a la pareja haciendo énfasis en la zona vaginal y anal. Que mejores preliminares y preparación; más sabiendo lo que vendrá después.
En el caso de que a lo largo de las practicas sexuales se realicen cunilingus, anilingus u otro tipo de felaciónes en principio el lubricante de cannabis casero no tendría porque ser un obstáculo. Parece ser que el sabor y olor no son desagradables pero os confieso que yo no le he probado, así que no me hagaís mucho caso.
Si eres de los que por la razón que sea utlizan preservativo has de sabe que el aceite de coco daña el latex, así que tendrás que comprar condones de poliuretano. Este es otro de los contras de el lubricante de marihuana casero hecho a base de aceite de coco.
El sexo en solitario (la masturbación) no está reñido con la utlización de lubricante de cannabis. Si te gusta disfrutar de uno de los mayores placeres de la vida y compartir ese momento contigo mismo, te invito a hacerlo con lubricante de cannabis casero.
Relajación y Placer, Orgasmos Espectaculares
La marihuana no sólo nos provee de relajación y placer por los métodos tradicionales. Me refiero a que hay mucha gente que consume marihuana para mejorar el sexo, pero los efectos y las sensaciones que provoca el fumar un porro son muy diferentes a los que produce el lubricante de cannabis.
La primera y principal razón es que con el lubricante vamos directos al grano. En consecuencia se focaliza e intensifica mucho mejor el potencial de la marihuana.
Aún conteniendo los mismos compuestos psicoactivos que podemos encontrar en un porro, no tiene los mismos efectos. Al no entrar en juego el hígado ni el torrente sanguíneo, se metaboliza de otra manera.
Con lo cual no te colocará como de costumbre, pero si te recompensará con una relajación y un placer eufórico. Y ya no digamos si formas parte del sexo femenino.
Porque son precisamente ellas las más afortunadas a la hora de utilizar el lubricante de marihuana casero. Según cuentan algunas féminas este aceite de cannabis es capaz de proporcionarlas un placer extra y prolongar el orgasmo durante minutos.
No para todas las mujeres es fácil llegar al orgasmo, pero con esta preparación se da el caso no sólo de que el sexo se vuelve más placentero, sino que además los orgasmos múltiples se vuelven más habituales.
Al tratarse de un ungüento de uso tópico, la vagina de la mujer es más eficiente asimilando los componentes activos. Por el contrario el pene no es capaz de importar las bondades del lubricante de cannabis con tanta facilidad.
Pero tranquilo; el placer no es exclusivo de la mujer. El flujo sanguíneo se incrementa sensiblemente y mejora tu rendimiento en la cama.
También hay que destacar que este elixir mágico vuelve más sensibles los órganos sexuales. Multiplicando por 10 las sensaciones y experiencias eróticas.
A Tener en Cuenta
Dentro de los ingredientes necesarios para su preparación está incluida una cucharada de lecitina de girasol. Un componente que es vital para ayudar a que los cannabinoides sean absorbidos con más facilidad por el cuerpo.
Si eliminas a la lecitina de la lista en vez de lubricante de cannabis casero lo que estarías elaborando sería aceite de coco cannábico. También podrías utilizarlo como lubricante, pero el placer disminuiría mucho y ya no digamos el orgasmo.
En contra de lo que mucha gente afirma el lubricante de marihuana no es algo exclusivo para la mujer. Si bien es cierto el los organos femininos estan predispuestos a asimilar mejor el lubricante de cannabis, no es menos cierto que el varón puede aprovechar al máximo el potencial del lubricante; tanto en pareja como en solitario.
Antes ir terminando quiero destacar otra cualidad nada despreciable del lubricante de marihuana casero. En su preparación no han entrado en juego productos químicos que pudieran ser perjudiciales para el organismo, con lo cual además de procurarnos un placer y orgasmos espectaculares, tenemos garantizada la excelente calidad del producto que estamos utilizando.
Quizás te pique la curiosidad y tengas la tentación de innovar y sustituir el aceite de coco por otra grasa. Es mejor utilizar aceite de coco ya que este potencia la acción del cannabis.
Si quieres experimentar te invito a que lo hagas con alguna receta cannábica. Puedes probar a hacer un pastel de marihuana a tu manera, o una pizza de marihuana singular.
Te recomiendo que para hallar las dosis y tiempos más convenientes lo mejor es ir probando por tu cuenta. Cada cuerpo es único, y no hay dos iguales.
Para acabar quiero decirte que para aquellas parejas a las que les sea difícil la concepción, el lubricante de marihuana puede ser un buen aliado. La relajación y el placer que proporciona predisponen a la mujer a quedarse embarazada.
Mira tú por donde el cannabis también puede ayudar a convertir en realidad el sueño de muchas parejas. Haciéndolo de una forma natural y en la intimidad conyugal.