Mantequilla verde

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"Mantequilla de cannabis, también conocida como Cannabutter"

La mantequilla de cannabis, al igual que el aceite cannábico, son las bases para un sinnúmero de recetas, tanto dulces como saladas. Así que vamos a aprender de manera sencilla, como logramos hacer mantequilla voladora.

Necesitamos:

1 pan de mantequilla (con sal)

Aproximádamente 7 gramos de de cogollos.

*Si prefieres hacer margarina cannábica, simplemente reemplaza la mantequilla por margarina.

Ok, entonces manos a la obra. Primero derretimos la mantequilla en un sartén. Agregamos los cogollos y cocinamos a fuego lento por 45 minutos, revolviéndo constantemente.

Después pasamos la mantequilla a una fuente de vidrio usando un colador. Con el revérso de una cuchara, presiona los cogollitos para que expulsen toda la mantequilla que absorbieron. Estos cogollos han dejado todo su efecto en la grasa de la mantequilla, asi que retíralos de la mezcla.

Tu mantequilla verde está lista para ser usada, pero también puedes refigerarla para usarla después. Puedes escalar la receta para un festín cannábico; para 4 panes de mantequilla, usa unos 28 gramos de cogollos, pero en este caso habrá que cocinar la mezcla por 60 minutos.

Puedes incluir la mantequilla en pastas recien hechas, en palomitas de maíz para disfrutár instantáneamente o para acompañar tus tostadas matutinas. También puedes guardar la mantequilla en el refri o el freezer para usarla en otras recetas.

*Para quienes utilicen el cannabis como medicina, se puede aumentar la cantidad de cannabis, para incrementar el efecto, para 4 panes de mantequillas se pueden usar hasta 56 gramos de ganja.

Es importante seguir atentamente el proceso de cocinar la weed con la mantequilla, para que no te pase lo que me ocurrió a mi. Una noche llegué muy cansado donde una amiga voladora y nos pusimos a cocinar la mantequilla en una olla antigua que le regaló su abuela. Dejé la mezcla cocinándose y como demora 45 minutos, nos fuimos a dormir una siesta. No se cuanto tiempo habrá pasado, pero el gato de mi amiga se subió a la cama y me despertó, ahí me di cuenta que me picaba la garganta. Cuando abrí los ojos, vi que la pieza estaba llena de humo. El olor penetrante de mantequilla quemada había inundado todo el departamento. Corrí a apagar el fuego y luego a abrir las ventanas. El olor a mantequilla quemada es algo asqueroso que me tenía con arcadas respirando por la ventana. Tuvimos suerte que los vecinos no llamaran a los bomberos, porque el pasillo estaba lleno de humo, tal vez todos en el piso se volaron. Finalmente logramos ventilar el departamento, mi amiga vió como la olla de su abuela quedó desfondada, la mantequilla carbonizada y su pobre gato que no entendía nada, durmió raja hasta el día siguiente.

Así que ya saben, nunca descuiden su cocina, y si van a volar entremedio, dejen un reloj con alarma .

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Buenisimo aporte compi un saludo.